martes, 14 de abril de 2009

Víctor Valero: El concepto de Falla Cartel

El ahora firmante Marc Martell, antes conocido como el artista fallero Víctor Valero (o Triple V como cariñosamente le denomina mi amigo Fernando), es uno de los máximos exponentes de la nueva corriente fallera infantil, pero no solo son fallitas lo que engalanan su repertorio.

El entorno de la falla infantil, en la actualidad más aperturista, goza de una gran variedad de estilos, que trata de romper con toda tendencia anterior (Clasicismo, Barroquismo fallero..).
A modo de Vanguardia, varios artistas, entre ellos Víctor, dan nuevas luces a la categoría.

Cual revolucionario, nuestro analizado hoy, huye de los focos del “capitalismo fallero”, dedicando su esfuerzo a comisiones de barrio con ideas muy claras y contemporáneas, como Palleter, Ribesan (Ripalda, Beneficencia, San Ramón) o Norte - Dr.Zamenhoff. No antes sin haber catado la sección especial (Reino de Valencia – Duque de Calabria, 2005, “Futur Perfecte”), fallita que tuvo la nimia recompensa de un 15º premio, pese a su caracterización infantil y su giro en la estética.

Sin embargo, esa falla espoleo a Víctor a intentar progresar, desde su lenguaje, para transmitir su concepto a los más pequeños. Llega entonces la falla cartel (No en vano, Víctor es un destacado cartelista e ilustrador), o falla POP, término que tanto gusta al artista. En sus monumentos se nos presentan conceptos del arte pop, como son los iconos, las marcas comerciales, y sus logos y símbolos. Entre ellos destacar la Vespa, Michelin, o incluso grupos musicales como la E.L.O, además de colores como el Morado, que marca su trayectoria. A la vez, atraen la atención del adulto, lo que anima a transmitir sus vivencias a sus hijos.
Esto no es más que un sencillo e identificativo pretexto para mostrar a los niños temas cotidianos e infantiles a partir de un concepto o palabra (La Pintura, Cestas, Los Complejos, Marcas….). Destacar la labor didáctica que desarrolla en cada proyecto, un regalo a la niñez.



Sin embargo, todos estos elementos de su lenguaje, tienen el culmen en la Falla grande de Ripalda-Beneficencia-San Ramón ’09. El catafalco, de clara visión frontal (Como la gran parte de su obra, apoyada en estructuras auxiliares), nos presenta una gran R (de “Recuperar”, de Ripalda) rodeada de un icono pop como es el Bibendum, el muñeco de Michelin. Las pocas figuras con las que cuenta el monumento, representan a la perfección el lema, entre ellas, a destacar dos, la llevada a la exposición, con mensajes políticos de los que pocos se atreven a realizar, en referencia a la memoria histórica, recordando más si cabe la idea de cartel propagandístico, cual Renau contemporáneo. La otra escena nos recuerda varias portadas de disco de vinilo, instando a recuperar esa faceta artística de la música, ahora perdida.

Como rezaba la falla infantil de Ribesan ’07, sus proyectos son Folk-Pop, originales, libres de cualquier refrito, a las que me gustaría añadir su carácter didáctico a partir de la Falla Cartel.